Existe una relación laboral cuando una persona realiza una actividad o un servicio por cuenta o para beneficio de otra, recibiendo órdenes de esta y además percibiendo un salario o un pago a cambio.
Se entiende que una persona se encuentra dentro de una relación laboral cuando una persona trabaja en favor de otra, es decir por cuenta ajena, bajo una relación de obediencia y dependencia y a cambio de ello percibe un salario. (Fagalde, 2014). Sin la existencia de estos 3 elementos es imposible hablar de una relación de trabajo jurídicamente reconocida.